вівторок, 17 липня 2012 р.

CARTA DE BERMUDEZ SOBRE LA IDA DE ROMAN

Hasta siempre Romy

En el momento de mi llegada a Boca Juniors por allá en el año 1997 el grupo de jugadores era heterogéneo, grandes figuras Maradona, Caniggia, Fabbri, Latorre, Martínez entre otros eran protagonistas indiscutidos de ese presente que reflejaba la ausencia notoria de resultados y la impaciencia de una hinchada que los pedía a gritos, en ese plantel también descollaba un joven talento llamado Juan Román Riquelme.

Joven de pocas palabras, caminar lento y cabeza baja, Romy, como solía llamarle hacia diferencia con su gran calidad técnica, su visión de juego y enorme pegada con derecha. El mismo día del último juego de Diego Armando Maradona, ese 25 de octubre de 1997, era Romy quien asumía el rol de conductor de aquel equipo de Veira del 97 que perdiera el titulo argentino por solo un punto.

La llegada de Carlos Bianchi y la presencia de Julio Santella le entregaría la fortaleza física necesaria para asumir el rol conductor de un equipo sediento de gloria y nosotros sus compañeros depositamos en aquel joven toda la confianza, obligándolo deportivamente a asumirla.

Dios me ha dado grandes gustos en mi vida futbolística y uno de ellos fue disfrutar a Romy en su plenitud futbolística, talento, fuerza, inteligencia y potencia que serian vitales en los mejores logros de aquel inolvidable equipo de Bianchi que dependía en gran parte de su genialidad.

Luego de su paso por Europa regresaría para regalarle a la institución la copa libertadores del 2007 y los torneos apertura del 2008 y 2011 dejando su magia en cada uno de los corazones xeneixes.

Hace poco en una entrevista televisiva le pedí a Romy una sola cosa, como compañero, como amigo y como hombre de Boca, “prométeme que no te irás mas de Boca y que jugaras tu último partido con la camiseta de Boca en La Bombonera”, semejante pedido tenía que ver con mi conocimiento de las diferencias que el 10 mantenía con el cuerpo técnico y la fría relación que lo unía a la actual dirigencia.

Y es que la derrota de Jorge Ameal en las elecciones del club el año pasado debilitaron a Román dejándolo a merced de una nueva administración con pensamientos alejados del respeto y valoración que la máxima estrella del club en estos momentos necesitaba y merecía.

Hoy la realidad supera cualquier novela de terror, la historia se repite, gran numero de los grandes ídolos de Boca terminan retirados en clubes lejanos y sin la oportunidad de despedirse de esa afición por la que dejamos la piel en la cancha. Muy lejos de la institución en la que plasmamos nuestros mejores momentos como profesionales, Román es Boca, Román es de Boca, Román siempre en los corazones del verdadero hincha de Boca.

Besos a todos.

3 коментарі:

rinoceronte сказав...

Eres grande, Casique!

Sergio Aguero сказав...

Лишний раз впечатлился, как давно всё было. 1997 год! 15 лет назад - казалось бы, так давно, хотя так уже не кажется, когда вспоминаешь, что сам я узнал о Рикельме в 1999-м - благодаря Копе Америка. Тогда он меня сразу поразил своим фантастическим мастерством и встал в ряд моих самых любимых игроков - к Батистуте и Дзанетти. В том числе и благодаря этому я стал пристальнее следить за аргентинским футболом, хотя информации тогда было, прямо скажем, немного - правда, в отличие от времён нынешних, бывали толковые футбольные передачи, где можно было посмотреть хороший обзор не одной, а даже двух-трёх игр аргентинского футбольного первенства.

Затем Рикельме отправился в Испанию, и лично за ним стало следить заметно проще. Что интересно, в Барселоне он практически все те отрезки, что ему давал Ван Фаталь, играл великолепно (как в Боке, а то и лучше), а вот в Вийярреале он поймал свою игру только через год-полтора после своего прибытия туда.

Ну и последняя ярчайшая вспышка - Либертадорес-2007, ставший своего рода продолжением Вийярреала-2006 (только с более сильными партнёрами, что давало ему бОльшую свободу действий, ведь в Вийярреале все знали, кого брать, а здесь партнёры оттягивали значительную часть внимания на себя), а заодно напоминанием той Копы-99, где что ни удар - то в девятку, что ни касание - лухо или отличный/гениальный пас.

С тех пор, имхо, Рикельме потерял немного в скорости, да и искрит не столь сильно. И, это уж без сомнений, уже больше не играет так, как в том Либертадорес и на Копе Америка-2007.

La Doce сказав...

Sin mago no hay magia; sin Román, no hay futbol.